Los videojuegos de conducción son muy populares en realidad virtual, pero la realidad es que no existe ninguno que merezca la pena para dispositivos standalone como Meta Quest. Downtown Club, que ya está disponible en acceso anticipado, llega con el deseo de cambiar esto. He jugado ya a este juego de VR hecho por una persona y te cuento lo que me parece.
Downtown Club
Downtown Club es un juego de carreras con controles virtuales completos y emocionantes reacciones de conducción, creado desde cero para la realidad virtual autónoma. Coge el volante, la palanca de cambios y el freno de mano, toma el control total de tu coche y ¡conviértete en un campeón del automovilismo!
Juego de coches de VR en Meta Quest de forma nativa
Los que me conocéis sabéis que llevo jugando a videojuegos de conducción toda mi vida. Cuando jugaba a Toca Race Driver en PC o a Gran Turismo en PlayStation era incapaz de imaginar hasta dónde llegarían estos juegos. En los últimos 15 años, el simracing ha evolucionado una barbaridad y yo llevo unos 10 años jugando con volante a iRacing, Assetto Corsa, Automobilista 2, Gran Turismo 7 y más.
Muchos de estos juegos también se pueden disfrutar en VR y la sensación es absolutamente brutal: la combinación de utilizar volante y recibir la fuerza del force feedback con el uso de la realidad virtual es una experiencia que cualquier persona debe probar alguna vez. Pero, todo sea dicho, para disfrutar de algo así tienes que contar con un montón de equipo.
Un PC o una consola, los videojuegos y un dispositivo de VR. Poca broma. Además, estos juegos tienen la realidad virtual como una opción, no se han creado pensando en eso únicamente. Y eso está bien, pero los usuarios de gafas standalone no tenían ningún título que mereciera realmente la pena. Ni siquiera el simpático V-Speedway, predecesor de Downtown Club, cumplía con unos estándares mínimos.
Pero ese V-Speedway es, sin duda, el prototipo que permitió a Commuter Games (un estudio formado por una persona, que recibe muy poco ayuda externa) desarrollar después Downtown Club, el juego que nos ocupa hoy. Así que, sólo por ese aporte tan importante, no quiero olvidar a V-Speedway, un juego de conducción free to play de realidad virtual que, al menos, sirve para darte cuenta de las increíbles posibilidades de la VR.
Pero eso es historia. Commuter Games ha lanzado en acceso anticipado Downtown Club, un juego de coches y carreras urbanas de realidad virtual. El título está disponible en Meta Quest Store y es compatible de forma nativa con Quest 2, Quest Pro y Quest 3 (yo he jugado en Quest 2). Este juego sí se ha desarrollado pensando en VR, por lo que puedes esperar un control muy amplio del vehículo con tus propias manos.
Downtown Club es un videojuego de realidad virtual con mucho potencial
En Downtown Club nuestro objetivo es ser el piloto más rápido de la ciudad. En la urbe del título se disputan carreras urbanas por trazados enrevesados, que aprovechan los giros de 90 grados, las rotondas o incluso los túneles para formar recorridos muy divertidos y variados. Sin duda, hay un aroma a algunos clásicos, como Gran Turismo o Project Gotham Racing, tanto en el planteamiento, como en el desarrollo.
Aunque no hay marcas de coches reales (lo merece, ojalá reciba apoyo de empresas de automóviles e inversión para ser un videojuego grande), recibes tu primer vehículo al empezar, un hatchback que competiría perfectamente con un Renault Clio o un Peugeot 308. A partir de ahí, tienes que competir en diferentes campeonatos para subir tu nivel y acceder a mejores pruebas.
Tras participar en los torneos obtienes tickets que sirven para hacer compras: nuevos coches, pinturas para los vehículos o elementos de tu traje de piloto. La tienda cambia los productos cada ciertas horas, por lo que hay que estar siempre atento. De momento, eso sí, hay pocos vehículos: tres coches, con versión estándar y deportiva, pero hay que tener muy en cuenta de qué juego estamos hablando.
El desarrollador del juego escribió un hilo en X (Twitter) hace unos días explicando que si no lanzaba Downtown Club ya no podría seguir el desarrollo. Necesita dinero. Es un proyecto pequeño, humilde, de una sóla persona, y hay que entender por qué tiene poco contenido (que, ojo, para desbloquearlo todo necesitarás varias horas). Por tanto, si lo compras y echas en falta más cosas, ten en cuenta esto. El contenido se ampliará con más coches, online y más. Aquí tienes el roadmap.
Dicho esto, creo que hay suficientes circuitos para estar recién salido en early access. Pero creo que lo más importante no es esto. Lo es la jugabilidad, que es muy buena desde el inicio. La base jugable es genial. Me ha resultado curioso que el propio Downtown Club te deja claro al iniciarlo que es un simcade, es decir, un juego a medio camino entre los arcades y la simulación (Gran Turismo y Forza entran en esta categoría).
Y creo que logra perfectamente el objetivo. La conducción es más que buena, con buen comportamiento del coche en general. Hay que tener en cuenta una cosa: desarrollar un sistema de físicas es muy complejo y estas gafas de realidad virtual tienen una potencia ridícula si las comparamos con las consolas o los ordenadores actuales. Lo que consiguen los desarrolladores es mágico y hay que ponerlo en valor.
Por tanto, no esperes que esto sea Assetto Corsa Competizione, pero puedes estar tranquilo, porque es entretenido y cumple su objetivo de ser un simcade. Llegados a este punto seguro que te preguntas cómo se conduce. Pues bien, los gatillos sirven para acelerar y frenar, pero el volante lo sujetas con tus manos y lo giras de forma realista (te recomiendo que subas los grados de giro a 360º al menos).
Además, tienes la opción de cambiar de marcha de forma manual, engranando cada una de las velocidades utilizando la palanca de cambio. Mola un montón, pero complica bastante la conducción, así que no te lo recomiendo de primeras. Por cierto, si te cansas de girar el volante, puedes rotar las ruedas con los sticks, pero le quita mucha gracia al asunto, aunque valoro positivamente que se haya introducido.
También puedes mover el asiento todo lo que quieras para ubicarte en el mejor lugar posible, algo que no puede faltar en un juego así y agradezco que esté desde el inicio. Por cierto, si estos juegos te marean un poco, hay numerosas opciones de confort. De todas formas, empieza poco a poco y, al final, tu cerebro se acostumbrará. Es como conducir y estás sentado, no necesitas hacer piruetas raras.
Otro detalle que me ha gustado es que los espejos funcionan. Van a una tasa de imágenes por segundo inferior al juego, pero es completamente entendible. Como te decía, llevo años disfrutando del simracing, así que sé por qué eso es así. Quizá te sorprenda, pero que los espejos estén encendidos y sean funcionales es una de las cosas que más recursos consume en estos juegos, así que ya me parece increíble que vayan. Por cierto, Gráficamente está bastante bien y los modelos de los coches son correctos. Es cierto que a los circuitos les falta vida, pero ya mejorarán.
Quizá el mayor problema actual del juego sea que hay una desconexión fuerte con la pista. Cuando juegas en VR a un juego de coches en PC o en consola, lo normal es usar un volante con force feedback, que te transmite muchas sensaciones del comportamiento del coche. Aquí esto no está, pero se suavizará con una actualización que introducirá vibración en los mandos, como ha confirmado Commuter Games, así que genial.
Como sugerencia, aunque esto sé que es más complicado, molaría mucho que, más adelante, los controles de los coches sean totalmente manipulables en VR: bajar ventanillas, tocar el claxon, usar los intermitentes si los tiene, encender manualmente los coches… Quizá es mucho pedir y no es que sea una prioridad, pero molaría mucho, especialmente teniendo en cuenta una cosa que también me gustaría ver.
Además de participar en campeonatos, carreras y time trial, es posible recorrer la ciudad libremente, sin que el trazado esté limitado a uno de los varios que existen en el juego actualmente. Sé que quizá también es mucho pedir, pero sería guay que ese modo libre tuviera una alternativa con tráfico real y se pudieran visitar concesionarios, tiendas de ropa u otros lugares. En ese contexto, controlar todo el coche, más allá de lo que se utiliza en una carrera, tendría más sentido.
Y sí, sé que puede ser raro que haya hecho varias sugerencias en el artículo pero, ¿sabes por qué las he hecho? Porque Downtown Club me ha encantado. La VR standalone y Meta Quest necesitaban algo así. Creo que el título tiene un potencial enorme y ojalá reciba inversión, colaboraciones con marcas y pueda ser un título grande, porque es algo que le vendría bien a la VR.
Por cierto, el juego sólo está en inglés de momento (español llegará, eso sí), pero tampoco es que necesites saber mucho para entenderlo, así que, que eso no te frene para adquirirlo. El planteamiento es fantástico y la base jugable es genial. Estoy deseando ver cómo evoluciona, y te aseguro que seguiré jugando muchas horas. Y, aunque le falten cosas, te recomiendo su compra.
