Análisis de Train Sim World VR: New York

La verdad es que esperaba con muchísimas ganas el lanzamiento de Train Sim World VR New York, así que mi decepción es considerable. No es el gran juegazo que esperaba, aunque tampoco todo es malo. Sí, vas a poder ser maquinista de trenes, pero te va a tocar poner mucha imaginación para paliar las carencias que tiene. Análisis de Train Sim World VR: New York.

Un mundo sin vida

Los videojuegos de simulación de conducción y pilotaje me encantan. No sólo me encantan todos “los de coches” que englobamos en simracing, sino también Microsoft Flight Simulator, los juegos de Saber Interactive (MudRunner y más) o Euro Truck Simulator 2, por citar algunos. También he jugado a simuladores de trenes, especialmente a la saga Tran Sim World.

Estos juegos cobran otra dimensión al ser jugados en realidad virtual, ya que son perfectos para aprovechar todas las bondades de esta modalidad. Por tanto, tenía muchas ganas de probar Train Sim World VR New York, un nuevo videojuego que ya está disponible en Meta Quest (he jugado en Quest 2). Ojalá pudiera mantener la misma ilusión y darte grandes noticias, pero no es el caso.

En el videojuego eres maquinista de trenes y debes realizar rutas entre estaciones para llevar a los neoyorquinos de un lado a otro. La interacción con la cabina del vehículo es adecuada y suficiente, pudiendo manejar lo principal: acelerador, freno, marcha, freno de emergencia o la apertura de las puertas. No hay nada banal que hacer, excepto poder abrir la ventana, aunque no se escucha nada distinto, ni viento, ni más ruido.

Y, fíjate, esto último puede parecerte tonto, pero es el gran problema que tiene el juego actualmente: le falta mucha vida, realismo e inmersión (tiene tela que diga eso en un título de VR). Está bien tener control básico y esperable del tren, pero todo lo demás en el videojuego rinde a un nivel tan bajo que se te quitan las ganas de seguir jugando. Y es un gran problema que espero que se solucione.

Primero, los escenarios están vacíos a un nivel indescriptible (aunque, según sus desarrolladores, la escala es 1:1). De hecho, el modelado de los mismos parece sacado de un juego simple de PS2 (si me apuras). Hay casas genéricas puestas sin sentido, árboles feos, zonas con fallos visuales… Se disimula en túneles o en zonas en las que los muros rodean las vías, pero en espacios más abiertos es terrible mirar por la ventana.

Segundo, para ser una línea de tren de Nueva York en Harlem Line, hay muy pocos NPCs en las estaciones (¡a veces sólo hay uno!) y lo peor es que ni se mueven. No hacen nada. Es más, cuando abres las puertas del tren, sólo ves en un gráfico cómo “se llenan” los vagones. Me pregunto de qué se llenarán, porque hay pocas personas en el andén esperando tu llegada.

Tercero, y relacionado con eso, faltan más elementos que ayuden a la inmersión: más efectos de sonido, eventos y situaciones diversas, rutas variadas… Me duele decirlo, pero en este sentido, se siente muy inacabado. Conducir en VR no sólo es “meterte dentro” del tren, sino que hay que acompañar la experiencia con todo lo que rodea a la actividad de la mejor forma posible.

Las limitaciones de Quest son evidentes, pero hay videojuegos que han conseguido llevar al límite estos dispositivos. Train Sim World VR New York está muy lejos de eso. Se siente vacío y te deja con una sensación bastante pobre. De hecho, es todo tan plano y las misiones son tan rápidas, que ni siquiera funciona del todo desde el punto de vista jugable. Por cierto, puedes bajar del tren y buscar coleccionables por las estaciones en el Modo Viaje.

Conducir el tren es lo mejor

La conducción del tren está bien. Como te decía, tienes control sobre todo lo que hace la máquina y cualquier tipo de jugador puede disfrutarlo, incluso sin tener ni idea. El tutorial es claro y todo es muy intuitivo. Desconozco si falta alguna funcionalidad importante, porque no entiendo mucho de trenes, pero me ha parecido divertido manejarlos, además de relajante.

Y sí, es algo tranquilo de hacer, a pesar del enfoque jugable. El juego te invita a hacer misiones de unos pocos minutos en las que te mete mucha prisa (cosa que está bien, porque los trenes tienen que cumplir un horario estricto). Debes ir de una estación a otra en un tiempo límite y sumar puntos, algo que determinará tu rendimiento en cada prueba. Pero hay otras formas de puntuar.

Hay zonas en las que debes activar la bocina (también si encuentras a operarios o fans de los trenes) o puertas virtuales por las que debes pasar a una velocidad determinada, algo que te obliga a estar cambiando constantemente la aceleración y el frenado del vehículo. Por tanto, aunque relaja conducir, en realidad tiene poco de relax, ya que tienes que intervenir constantemente (excepto en el citado Modo Viaje).

Como digo, me lo he pasado bien conduciendo, pero las situaciones son muy repetitivas, forzadas a veces, además de ser excesivamente rápidas. Me gustaría que hubiera rutas más largas y más variedad de acciones a realizar, incluso en otras zonas del tren o en las estaciones. Al menos disfrutarás de estar sentado a los mandos de la máquina, es una sensación chula (especialmente si eres amante de los trenes).

Tengo una sensación agridulce, porque podría ser un gran videojuego, pero parece a medio hacer. La saga es mucho mejor que esto y creo que este título no hace justicia a la trayectoria que ha seguido este simulador tan querido en el mundo del PC. Ojalá pueda mejorar en el futuro y ser más inmersivo. A pesar de mis sensaciones encontradas, sigo pensando que tiene mucho potencial.

Conclusiones

Train Sim World VR New York es una oportunidad desaprovechada. Su propuesta es ideal para la realidad virtual y conducir trenes es divertido. Es una experiencia accesible, clara y bastante satisfactoria al mando. Sin embargo, todo lo que le rodea (escenarios, ambientación, inmersión y variedad) está por debajo de lo deseable.

Por último, dar las gracias a Sandbox Strategies por cedernos una copia de Train Sim World VR New York.