La verdad es que si un videojuego me sitúa en la Italia renacentista y, para ser concretos, en Florencia, ya me gana de entrada, pero The House of Da Vinci VR me ha parecido muy interesante por sus acertijos retorcidos y por su respeto al artista italiano. Eso sí, su traslado a la realidad virtual no es todo lo fino que me gustaría, algo que le pasa cierta factura. Análisis.
DESARROLLADOR | EDITOR | PLATAFORMAS | FECHA DE LANZAMIENTO |
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Blue Brain Games | Blue Brain Games | PC VR | PS VR2 | META QUEST | 4 de diciembre de 2024 |
El legado de Da Vinci
Florencia, 1506. Blue Brain Games te da el primer golpe de sorpresa nada más empezar The House of Da Vinci VR, situándote en la ciudad italiana en plena era renacentista. La escena es idílica, con un atardecer maravilloso visto desde uno de los puentes que sortean un río. Eres un aprendiz de Leonardo Da Vinci, el artista, inventor y mil profesiones más que maravilló al mundo con sus ideas e invenciones.
Pero algo sucede y tu maestro desaparece, por lo que sales corriendo a su búsqueda. Para poder llegar a él, es necesario sortear un montón de acertijos que el propio Leonardo ha preparado. El juego está dividido en fases y cada una de ellas es una especie de escape room con multitud de puzles por resolver, que homenajean el legado que nos dejó Da Vinci.
The House of Da Vinci llega ahora a la realidad virtual, pero la trilogía (este solo es el primero) ha sido un éxito en PC y, especialmente, en móviles. Este es un port del original a la VR, que adapta los controles y la experiencia a esta forma de jugar, aunque de forma algo irregular. De todas formas, mi tiempo con el juego ha sido fantástico, porque los acertijos son una maravilla.
En cada localización hay puntos de interés en los que transcurre el puzle. Los acertijos se basan en la interacción con mecanismos, en la búsqueda de objetos o en la unión de estos para crear otros más complejos que te ayuden a avanzar. También es posible que tengas que tocar algunos ítems para cambiar su forma y poder usarlos correctamente. Es un título altamente interactivo.
Aunque no hay guías visuales de ningún tipo sobre qué se puede tocar y qué no, sí que hay algunas ayudas activas que ayudan a evitar bloqueos innecesarios. Por ejemplo, si es posible interactuar con un objeto para cambiar su forma, verás que se muestra con un borde rojo dentro de tu inventario. Es más, si estás bloqueado, puedes pedir una pista pulsando un botón (y te aseguro que es probable que lo hagas alguna vez).
Los acertijos son muy divertidos y es una auténtica gozada ver cómo los objetos se abren y revelan nuevos secretos. Además, Da Vinci te instala unos artilugios mágicos que te permiten tener una visión especial para ver cosas que no están accesibles a simple vista y manipular el tiempo, para visualizar acciones pasadas que tuvieron lugar en una zona concreta, lo que sirve para obtener información adicional.
Mecánicas VR algo problemáticas
El problema que encuentro es que, aunque hay muchas interacciones, no están bien resueltas en VR. La mano virtual no imita bien los movimientos que haces en el mundo real y, de hecho, el dedo índice se extiende sólo al acercarte a zonas que puedes tocar, algo que se hace extraño, puesto que no sientes que estés teniendo contacto real con el objeto (puedes estirarlo, claro, pero no es lo mismo).
También se resiente la experiencia cuando debemos deslizar alguna pieza de un mecanismo, porque el movimiento es algo brusco. No es nada horrible, pero se nota que es una mecánica que funcionaba mejor en móvil que en realidad virtual. El otro inconveniente es que no podemos andar libremente por los escenarios y sólo puedes teletransportarte a las zonas en las que se puede interactuar (aunque sí puedes rotar).
Entonces, la realidad es que nos encontramos ante una disyuntiva curiosa. Aunque no me había pasado el juego antes, sí lo había probado un poco en móvil. Tengo claro que The House of Da Vinci VR es mucho mejor videojuego en realidad virtual que en plano o en PC, porque vivir los acertijos en primera persona se siente natural. El problema está en que las mecánicas VR son mejorables.
Aún así, ten claro que es un videojuego disfrutable y que es posible lidiar con esos inconvenientes, pero es cierto que no es una experiencia perfecta. Si el estudio decide portear el resto de la saga a realidad virtual, seguro que podrán mejorar la experiencia y hacer un producto más redondo. Dicho todo esto, insisto en que es un título muy entretenido y que te maravillará si te atrae la ambientación tanto como a mí.
Enamora visualmente
He jugado en Meta Quest 2 y el videojuego se ve fantásticamente bien. Se ha hecho un trabajo increíble para mostrar unos gráficos detallados, usando una muy buena resolución. Es genial ver cómo todas las texturas están a un gran nivel, también si miras de cerca, y es fácil leer incluso los textos que están escritos en objetos in-game. Es una chulada estar ahí dentro.
Lo que sí que no entiendo es que los textos no estén en español. Están disponibles en un montón de idiomas, algunos muy minoritarios (esloveno, que me parece genial), pero no en el nuestro. Lo extraño del caso es que el juego sí está en castellano en su versión en plano. Entiendo que se han añadido algunos textos nuevos por los tutoriales de VR, pero hay muy pocos y se podría haber hecho de forma más o menos sencilla.
Conclusiones
The House of Da Vinci VR es un muy buen juego de puzles y te divertirá resolver los acertijos de Leonardo. Gráficamente es genial y es un título muy interactivo, aunque las mecánicas VR son mejorables. Aún así, es muy disfrutable.
Por último, dar las gracias a Blue Brain Games por cedernos una copia de The House of Da Vinci VR.