Análisis de Slot Car VR

Juego a demasiados videojuegos cada año (sí, has leído bien y mantengo lo dicho) y a veces tengo la sensación de que la sofisticación de algunas propuestas provoca que la diversión no sea tan evidente. Pues bien, con Slot Car VR me ha pasado todo lo contrario: es un proyecto humilde, sencillo, que hace pocas cosas, pero las hace bastante bien. Análisis de Slot Car VR.

Scalextric en VR sin desordenar nada

No sé qué edad tendrás, pero yo crecí con un Scalextric en casa. Otras generaciones también disfrutaron de este juguete y hoy en día muchos entusiastas siguen coleccionando coches, montando pistas y echando carreras en estas pistas eléctricas. Aunque en España ya no es tan popular como hace años, a cualquier persona le divierte jugar un rato a esto.

Por eso, Slot Car VR ha sido un golpe de nostalgia brutal para mí. En este sencillo juego de realidad mixta debes construir pistas de slot y probarlas con diferentes tipos de coche. La libertad para crear pistas es total, aunque existen algunos límites, ya que el juego respeta las físicas reales en líneas generales. Pero, gracias al juego, he convertido mi habitación en un gran circuito de Scalextric (que me pague la marca).

Básicamente, hay dos formas de jugar: por un lado, puedes crear las pistas como te dé la gana, poniendo carreteras normales o de diferentes tipos que modifican la trayectoria, y objetos decorativos alrededor del circuito para darle gracia completa. La cantidad de ítems es muy buena y me ha sorprendido para bien, aunque me ha parecido complicado poner una “base” de hierba o tierra personalizada.

Es decir, puedes colocar grandes bloques de césped o enormes rocas, pero no puedes “construir” zonas de hierba a tu gusto, como sí puedes hacer con la propia pista. Sería genial que añadieran esto, la verdad, porque creo que facilitaría el construir trazados completos con decoración. Ahora mismo, a no ser que seas un virtuoso, es mejor olvidarte de “la tierra” y construir la pista sin tener eso en cuenta (puedes decorar igual).

Me ha gustado muchísimo lo sencillo que es construir casi cualquier cosa y, como el juego es en realidad mixta, puedes moverte sin miedo a golpear nada, para poder construir la pista como quieras. Puedes hacer trazados bastante locos. Te invito a fijarte en las capturas que te comparto, aunque ten en cuenta que el fondo es negro porque no he capturado mi habitación en realidad mixta, por temas de privacidad.

Y, por otro lado, la segunda forma de jugar: una vez que has hecho tu circuito, puedes colocar un coche en ella para probarlo y ver qué tal funciona. No hay mucho reto en rodar los coches y con que levantes un poco en las curvas más problemáticas, nunca te saldrás. Algo curioso es que, si haces varias vueltas, puedes rodar a fondo y el coche no sufre accidentes. No he entendido bien por qué pasa esto, pero… pasa.

Correr contra otros jugadores

Algo muy guay es que puedes compartir tus creaciones con todo el mundo y marcar un tiempo de creador (por ejemplo, 5 o 10 vueltas seguidas y marcar un tiempo), para que otros jugadores descarguen tu pista e intenten superarte. Por supuesto, tú puedes hacer lo mismo: hay disponibles trazados creados por la comunidad que puedes descargar en cuestión de segundos para probar otras pistas.

He visto de todo y hay algunas realmente chulas, aunque es cierto que se nota que no hay una base de jugadores muy amplia de momento. Ojalá haya más y se creen nuevas pistas porque, aunque Slot Car VR es un juego muy sencillo, mola mucho y la idea está bien ejecutada. Por cierto, tiene modo online, incluso para construir en la misma habitación si os juntáis dos amigos con el juego.

Me hubiera gustado que tuviera algún tipo de modo Carrera para competir contra la IA en diferentes pruebas y que existiera una tienda donde comprar nuevos coches de slot, con su packaging y todo, algo que hace muy bien Crumbling. Sin duda, creo que tiene mucho potencial para ser más de lo que es, pero es cierto que este proyecto es pequeño y lo que ofrece es lo que promete.

Lo he disfrutado en Meta Quest 2 y me ha funcionado perfectamente. Claramente, cualquier juego de realidad mixta está más orientado a Meta Quest 3 o Meta Quest 3S, y estoy seguro que con un passthrough mucho mejor aún será una experiencia más redonda. Pero, vaya, si tienes Quest 2 y te llama… Cómpralo, que encima es barato y es muy simpático, también en sus gráficos.

Conclusiones

Slot Car VR es un juego pequeño y humilde, pero da exactamente lo que propone. Construir pistas de Scalextric en realidad mixta es realmente divertido y es muy intuitivo crear la pista de tus sueños. Molaría que tuviera algún modo para competir contra la IA en carreras o que tuviera más coches, pero es un título muy entretenido.

Por último, dar las gracias a Mighty PR por cedernos una copia de Slot Car VR.